"La vida sale al encuentro" de José Luis Martín Vigil

No sé si decir cuántos años hace que leí este libro, porque son muchísimos. Lo leí a los 11 o 12 años cuando vivía en Marín, por lo que podía imaginarme perfectamente los lugares donde transcurre la historia y meterme de lleno en ella. El verano pasado mi prima me comentó, hablando del blog, que le tenía que dedicar una entrada a "La vida sale al encuentro", que era uno de los libros que más le habían gustado cuando era niña, a mi también. Sobre la marcha preparé la entrada pero estaba esperando el momento para publicarla y hoy ha llegado el día. Una joven lectora,  Carlota de 12 años, me preguntaba por uno de los libros del blog, si era apropiado para su edad. Por el libro que preguntaba, "Gemelas", no me parecía muy propio así que le dije otros títulos que me habían gustado a su edad y este es uno de ellos. Esta entrada va por ti Carlota, para que sigas leyendo y disfrutando de los libros. Espero que te guste tanto como me gustó a mi.

Sinopsis

En esta novela, un muchacho de quince años nos relata su vida en el seno de su familia, en el círculo de sus amigos y en el colegio donde está interno; todo ello en el transcurso de un año pródigo en contrariedades para él. La descripción es minuciosa en detalles. Se siente su gran admiración por su padre, el cariño hacia su hermano, la total entrega que hace de su confianza en el padre Ürcola... y el amor por su prima. El protagonista posee un corazón grande y un temple magnífico, a pesar de las caídas.

Yo creo que ha sido uno de los libros con los que más he llorado. Recuerdo haberlo leído casi de un tirón. Me había encantado y me imaginaba los personajes como si realmente los conociese. Es un libro que me apetece volver a leer pero me da miedo comparar la vida de los adolescentes de los años 60 y los de ahora, la cantidad de valores que se han perdido por el camino. Quiero dejar claro que en las entradas del blog juzgo simplemente los libros que leo, no la vida de los autores ni sus creencias. Esto lo digo porque antes de escribir la reseña he estado leyendo artículos sobre el autor. Yo no soy nadie para juzgar la vida de los demás, ni tampoco me creo todo lo que leo en prensa. Recordando que este libro me había gustado muchísimo, a pesar de la llorera, lo recomendaría a los jóvenes de ahora (aunque puede que les resulte un poco carca y anticuado).